Esta jornada tuvo lugar en Valladolid los días 23 y 24 de octubre. En primer lugar se trató la financiación que puede llegar por parte de los FEDER y Fondo Social Europeo dirigidas a actuaciones de vivienda en barrios deprimidos y como apoyo a programas sociales que las empresas quieran desarrollar.
Tras esta intervención se trató la cuantificación económica del beneficio social que aporta el sector de la vivienda protegida. Esta ponencia se impartió basándose en la experiencia de Viviendas Municipales de Bilbao que ha encargado un estudio de esta materia a la Universidad del País Vasco e hizo un avance de las conclusiones.
Seguidamente se abordó la nueva normativa que la Comunidad Autónoma de Castilla-León ha elaborado para adaptar y flexibilizar la legislación sobre la vivienda protegida adaptándola a las circunstancias actuales.
Tuvo lugar una mesa de buenas prácticas sobre los aspectos sociales en las áreas de rehabilitación urbana contándose con experiencias de Valladolid, Sevilla y Alicante.
Por la tarde tuvo lugar una visita técnica al Área de Rehabilitación Urbana del Barrio de la Rondilla.
El día 25 se presentó el resumen ejecutivo del Informe FOESSA: “La Vivienda en España en el siglo XXI. Diagnóstico del Modelo Residencial y propuestas para otra política de vivienda”.
Posteriormente tuvieron lugar dos grupos de trabajo: El primero trató sobre permanencia de las familias en grave situación económica en las viviendas sociales que abordó los mecanismos de gestión de cobros y los sistemas de apoyo y refuerzo de la economía familiar en tiempos de crisis. Las experiencias de Madrid y AVRA (Junta de Andalucía).
El segundo la lucha contra la exclusión residencia por motivos económicos. Programas de intermediación en deuda por residencia habitual. Arrendamiento y compraventa. Nuevas formas de acceso a la vivienda. Viviendas compartidas. Viviendas propiedad de las entidades financieras… con la experiencia de ALOKABIDE (País Vasco) y del Ayuntamiento de Barcelona.